Ayer por la mañana mi familia recibió otra dolorosa llamada telefónica, una de las muchas que hemos tenido en 20 años... Mi guapo, SANO y deportista sobrino de 16 años no se despertó.

En tierra se le practicaron a la víctima maniobras de reanimación, sin éxito, teniendo que confirmarse el deceso del surfista.

"Hay mucha gente que sigue con esta estupidez de asociar la muerte de jóvenes con la vacuna", aclara Serginho Carnevale sobre la muerte de su novia. 

Señaló que ella no se había puesto la quinta dosis de la vacuna, y por último recordó que Nayara se había contagiado de Covid a finales de año y que aún se quejaba de algunos síntomas que le había dejado la enfermedad.

“Estábamos jugando tranquilos todos, cuando de la nada vemos que se cae al suelo y se golpea duro”.

Ante lo sucedido, el joven fue trasladado hasta un centro asistencial, donde minutos después se confirmaría su deceso.

Los moradores del Once de Noviembre lo recuerdan como un muchacho noble, respetuoso y muy soñador.

Era la de siempre cuando desarrolló síntomas de gripe que rápidamente empeoraron. "Un día estaba tumbada en el sofá de casa, viendo Modern Family y quejándose del sabor del Lucozade que le habían comprado. Menos de 12 horas después estaba luchando por su vida en Alder Hey. Una lucha que, por desgracia, perdería menos de seis días después".

Sufrió un infarto mientras se encontraba en casa de sus padres. Los intentos de reanimarlo por parte de su cuñado médico, presente en el momento del infarto durante el almuerzo, fueron inútiles.

Era baloncestista y militar. Tras el final del partido entre el Proteas Schimatariou y el equipo del Ejército del Aire, se dirigió a los vestuarios para cambiarse. Allí su propia mujer, también ex baloncestista y ahora entrenadora,  lo encontró desmayado. Lo intentaron reanimar, pero en vano.

«No se puede morir así a los 12 años». Pocas palabras, lágrimas y desánimo de quienes presenciaron el drama. Davide se desplomó al suelo durante un entrenamiento de baloncesto y murió. El drama se desencadenó en el gimnasio de la escuela Guarino, donde se entrenaba el equipo. Al parecer, el niño de 12 años sintió un dolor agudo y repentino en la cabeza y se desplomó en el suelo del gimnasio.
Una ambulancia llegó y lo llevó al hospital San Giovanni di Dio de Agrigento. Murió en el camino, tras sufrir una parada cardiaca.

Se desplomó. La gente y los bomberos intentaron reanimarlo durante una hora, pero no volvió.

Estaba totalmente sano.

Murió dentro de la Secundaria "Heberto Castillo Martínez". Se desvaneció y comenzó a convulsionar. Tras el arribo de la ambulancia se constató que la joven ya no contaba con signos vitales, por lo que sus padres se llevaron el cadáver sin esperar al personal del Servicio Médico Forense.

Según testigos, la persona estaba en la caminadora pero de momento se desvaneció. Los asistentes al gimnasio notaron que quedó inconsciente. Murió allí mismo.

Por lo que entendí, la pequeña se puso enferma, los padres consultaron y le diagnosticaron una infección de oído, pero murió de estreptococo.

De repente, se fue al fondo, por causas que todavía se desconocen. Podría haber sufrido una parada cardíaca mientras nadaba.

El hombre pretendía acudir a una clínica cercana ante un fuerte dolor en el pecho, pero presuntamente se equivocó y confundió las instalaciones del Centro Estatal de Salud Mental con el antiguo hospital general

Basquetbolista del Paraná rowing club.. se desploma y fallece.. muerte subita.